viernes, 27 de julio de 2012

En el Diario Vasco

Hoy Santiago Aizarna, en el Diario Vasco, ha reivindicado los pasajes donostiarras de La ciudad de los ojos grises, cosa de la que me alegro porque los escribí con mucho cariño.
Aquellos años de su Belle Époque supusieron el germen de su intensa actividad cultural que ha tenido como culminación su designación como Capital Europea de la Cultura 2016. 
Para leer con más nitidez esta reseña, pueden pinchar aquí.

jueves, 26 de julio de 2012

Los lectores

No se amilanó ante los ochocientos metros del muelle de hierro. Uno a uno los fue recorriendo mientras la brisa se enfriaba.
Los labios de las olas rozaban la estrecha franja de arena como sin querer, sabedores de que de aquel beso entre el mar y la tierra no podía nacer espuma blanca. No, ese día no. Se hacía necesario preservar el gris del agua; el cielo así lo dictaminaba con su reflejo y su dolor. Alfredo perdió la vista en el horizonte, allí donde el paisaje se confunde con los pensamientos.
Todas las fuerzas de la naturaleza parecían haberse confabulado para teñir de gris el mar, para teñir de gris el viento. Alfredo elevó la mirada y sonrió, como agradeciendo el guiño. Ese gris no era otro que el de los ojos de Izarbe.
Este es uno de los pasajes que habrán leído los lectores de La ciudad de los ojos grises... los miles de lectores de La ciudad de los ojos grises. Cuando uno está creando una novela, busca que la historia sea creíble, en construir los personajes, en escribir las metáforas adecuadas... y, de una manera o de otra, anhela que esas páginas que hace un momento estaban en blanco, lleguen al corazón de quienes -quizás- algún día las lean. Porque no nos engañemos: a todos los escritores nos gusta que nos lean. 
Por eso, cuando uno puede contar sus lectores por miles se siente afortunado, sin ser muy consciente de lo que eso significa. Supongo que para llegar hasta aquí han influido muchas cosas, entre otras: la suerte.
En cualquier caso, me siento muy feliz de que La ciudad de los ojos grises se haya colado en tantos hogares y de que sus páginas estén siendo acariciadas por tantas manos. 
A todos mis lectores, solo puedo decirles: gracias... de corazón.

martes, 24 de julio de 2012

¡Que viva México!

Me consta que, al igual que en su día lo hicieran las novelas de don Fernando de Zúñiga, La ciudad de los ojos grises ha querido cruzar el charco para llegar a México. Así lo sé por algunos seguidores de Twitter y porque he comprobado que su precio de descarga en formato electrónico en una librería azteca es de 65,17 pesos (casi 4 euros). 
Un día de estos dejaré en mi bitácora elcazadordemomentos, más fotografías tomadas en tierras charras. 
Quien me conoce, sabe que soy un enamorado de las rancheras (mi preferida es Ella del gran José Alfredo Jiménez, con la que me arranco a la menor ocasión). Pero además de su música, de México me gusta su diversidad paisajística, su gastronomía, su historia, su acento, su gente... 
Por eso, he de reconocer que me hace ilusión que mis novelas puedan rodar y rodar, rodar y rodar... Desde aquí, mando un fuerte abrazo transatlántico a mis lectores mexicanos y ¡que viva México!

jueves, 19 de julio de 2012

New Elite Magazine

Esta es una panorámica de París desde las escalinatas del Sacre Coeur, otro de los escenarios de la novela. Desde esta atalaya, al atardecer, no resulta difícil imaginarse historias que transcurran en alguna de las buhardillas que pueblan la ciudad. 
Desde que terminé de escribir La ciudad de los ojos grises me asaltan secuencias, escenas que narré en algún momento. Hubo tanta evocación vertida en esas páginas que aún no he conseguido desprenderme de ella. Incluso ahora que ya la novela no me pertenece... o quizás por eso, y que sigue acumulando lectores.
Hoy quiero agradecer a New Elite Magazine el haberme incluido en sus lecturas recomendadas del mes de julio junto a autores a los que admiro.

viernes, 13 de julio de 2012

Reseñas

Desde que La ciudad de los ojos grises viera la luz hace tres meses, no han dejado de sucederse reseñas y entrevistas en numerosos blogs literarios. En mi opinión, cada día es más importante su labor a la hora de destacar una novela entre la avalancha que cada día llega a las librerías. Por eso, estoy más que agradecido a todos aquellos que me han dedicado: primero, un tiempo de sus vidas para leer mi novela, y segundo, un espacio en su blog.
A riesgo de dejarme alguna en el tintero, han sido las siguientes:
Entrevista en Lecturalia
Reseña en Papel en blanco
Entrevista en el blog de Antón Castro
Reseña en Anika entre libros
Reseña en Bitácora de mis lecturas
Reseña en el blog de Hoy
Reseña en De mesita
Entrevista en El Tintero
Reseña en Mis lecturas y más cositas
Reseña en Análisis digital
Reseña en Divergencias
Reseña en Ideas inconexas
Reseña en Entre montones de libros
Entrevista en Entre montones de libros
Entrevista en Propera parada cultura
Reseña en Los libros y yo
Reseña en Granada Blogs
Reseña en Lucía, Lurma y mis libros
Ahora espero que el boca a boca siga su curso, sin pausa pero sin prisa, y que se sigan sucediendo las reseñas. Ello querrá decir que seguirá aumentando el número de lectores.
La foto de la entrada es una vieja estampa de la playa de la Concha en San Sebastián, la misma que Alfredo Gastiasoro, protagonista de La ciudad de los ojos grises, ve desde una de las habitaciones del Hotel de Londres en su viaje a la capital donostiarra, donde se desarrollan algunos de los pasajes más relevantes de la novela, con fiambre incluido.
Mañana, sábado, por la tarde estaré dando una vuelta por el recinto de la Feria del Libro de San Sebastián, ubicada en la plaza de Gipuzkoa, por si alguien quiere pasar a saludarme. 

martes, 3 de julio de 2012

Semana Negra de Gijón


Si todo va bien, viajaré en el Tren Negro el día 6 y al día siguiente, festividad de San Fermín, tendré un encierro a las 20:30 horas en el Espacio A quemarropa para charlar de La ciudad de los ojos grises.
El miércoles 11 de julio, aunque yo ya no estaré, se presentará en la Carpa del Encuentro la antología de relatos Sospechosos Habituales: tras la pista de la nueva novela negra española en la que he participado, pero de la que prefiero no hablar hasta su puesta de largo oficial.
Así que no está mal para ser mi primera visita a Semana Negra. Y eso sin contar con las sidras que tomaremos con colegas, periodistas y lectores. Hasta pronto, Gijón.